El otro día me fui con mi familia a pasar el día al campo. Es una tradición que me inculcaron mis padres cuando era niña y que he seguido manteniendo con mis hijos y nietos. Cuando empieza a hacer buen tiempo nos ponemos las zapatillas y nos vamos a pasar el día al aire libre. Yo me levanto a primerísima hora y me pongo a preparar unas tortillas y un bizcocho. ¡Cómo hacía mi madre!