¡Hola amig@s!

El tiempo está loco. Unos días hace un frío que pela y al otro sale el sol y casi puedes salir a la calle sin abrigo. No es de extrañar que estemos todos con gripes, resfriados y demás enfermedades.

A mi estas temperaturas tan cambiantes también me han afectado y llevo varias días con dolor de garganta. Así que he puesto en práctica todos los remedios de mi abuela que conozco para combatir estas molestias.

Como ya os podéis imaginar, uno de los remedios más eficaces para calmar el dolor de garganta es la miel. Yo me preparo un vasito de agua con un par de cucharadas de miel y medio limón exprimido y lo caliento unos segundos en el micro. Si lo prefieres, puedes tomártelo con leche.

Junto con la miel y el limón, otro de los remedios más efectivos son las infusiones, entre ellas, el té verde y el té de jengibre. Para endulzar la infusión, un buen truco añadir un par de cucharaditas de miel en lugar de azúcar. También es mano de santo hacer gárgaras con agua caliente y sal o bicarbonato un par de veces al día.

Otra opción, es comprar en la farmacia o en un herbolario un frasco de propoleo con miel y lo vas aplicando en la garganta a lo largo del día.

Pero no todo es tomar infusiones y hacer gárgaras. También debes proteger la garganta de los cambio de temperatura con una bufanda o pañuelo, no forzar la voz (si es posible ¡no hables! J) y, por supuesto, no

 fumar (si es que tienes la mala costumbre de hacerlo).

Yo llevo 3 días siguiendo al pie de la letra estos remedios y ya me encuentro muchísimo mejor. Pero hay veces que esto no es suficiente. En ese caso, recordad la importancia de acudir al médico para que valore la necesidad o no de aplicarte un tratamiento.

¡Hasta la próxima amig@s!

 

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