¡La temida apendicitis se ha instalado en mi casa! Aunque es una operación muy sencilla que está a la orden del día, si no se diagnostica a tiempo, la apendicitis puede derivar en algo mucho más grave e incluso entrañar cierto riesgo.

La apendicitis no es algo que se pueda curar de manera natural, para eso no tengo consejos que daros pero en lo que sí que os puedo ayudar es con el post operatorio.

Tras la operación, lo primero que debes hacer es armarte de paciencia porque el descanso es un pilar básico de la recuperación. Pero, ¡ojo! descansar no quiere decir que tengas que estar todo el día en la cama como si estuvieras convaleciente, que eso tampoco es así. Es importante, que poquito a poco cojas por rutina salir a dar paseos, pero ¡cuidado! nada de hacer esfuerzos y muchos menos hacer movimientos bruscos o violentos como cargar peso. 

Otra cosa a la que le debes de prestar una atención especial es a la higiene de la herida. Lava la herida 3 veces al día con agua y jabón neutro para que no se te infecte.  

Junto con el descanso y la limpieza de la cicatriz, otra de las bases de una buena recuperación es la alimentación. Durante el tiempo que dure el post – operatorio, que, ¡no te asustes! ronda los 3 meses, debes modificar tu dieta y adaptarla a tu nuevo estado.

Para post-operatorio nada mejor que las verduras. Lo ideal es que las comas crudas aunque también es mano de santo para estos días el puré o las sopas, eso sí, procura que las verduras no estén demasiado cocinadas.

En el lado opuesto se sitúa la leche (de vaca) y los productos lácteos. Como sustituto puedes beber leche de avena, soja o almendra. Mi nieto, que no fue capaz de tomar esta leche, se aficionó al té verde y al agua con limón.

Entre los alimentos que también debes evitar, por lo menos los dos primeros meses, se encuentran los fritos, las legumbres, los dulces y, por supuesto, ¡las bebidas con alcohol!

Con todas estas cositas que os he contado parece que una operación de apendicitis es una tragedia ¡pero nada de eso! El post-operatorio es molesto pero si sigues estos consejos antes de que te des cuenta ya estrás recuperado y la apendicitis será sólo ¡una anécdota!

Nos vemos en el siguiente consejo,

¡Un abrazo muchach@s!

 

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